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Elementos constitutivos
La laguna de Venecia, gobernada por las mareas del Alto Adriático, es la laguna italiana de mayor extensión, casi 550 kilómetros cuadrados. Ambientes cambiantes y siempre diferentes se suceden desde la tierra firme al mar y caracterizan la compleja y estructurada morfología de la laguna, es decir, su forma, hecha de bajíos, “velme”, “barene”, islas y una densa red de canales. Como todas las lagunas, también la de Venecia es un ambiente en continua transformación, que tiende a ser “engullida” por el mar si prevalece la fuerza erosiva de las mareas y de las olas, o a transformarse en un trozo de tierra, si prevalecen los aportes de sedimentos que la laguna recibe de los ríos y del mar. En el caso de Venecia, las intervenciones del hombre han representado un factor decisivo en un proceso que ha permitido a la laguna sobrevivir, a diferencia de otras lagunas del Alto Adriático.
Tiempos remotos
Durante siglos, la tendencia evolutiva dominante de la laguna ha sido la del progresivo enterramiento. Para contrarrestar este proceso, los venecianos, conscientes que la degradación de la laguna habría podido comprometer irreparablemente la seguridad, riqueza y potencia de la Serenísima, ralizaron continuas intervenciones movilizando, implicando y requiriendo durante siglos todos los conocimientos científicos y técnicos. Se trataba de grandes obras; basta fijarse en las obras para hacer desembocar, fuera de la laguna, los ríos Brenta, Piave y Sile, en el corte de Puerto Viro (ejecutado en sólo 4 años y acabado en 1609) que desvió definitivamente el Pohacia el Sur dando lugar al actual delta, o también en el incesante perfeccionamiento de las técnicas de defensa de los litorales contra las agresiones marinas, culminando, en el sigloXVIII, con la construcción de los murazzi en piedra de Istria.
Tiempos recientes
Hoy, los problemas que comprometen el equilibrio del ecosistema lagunar son diferentes a los del pasado. Las transformaciones inducidas por el hombre y por la naturaleza han alimentado el proceso opuesto al enterramiento: el nivel relativo del suelo ha disminuido alrededor de 24 cm. respecto al mar y las ciudades están expuestas a las aguas altas cada vez con mayor frecuencia e intensidad. Al mismo tiempo otros problemas comprometen el equilibrio del ecosistema, tales como la erosión de las estructuras morfológicas de la laguna y la contaminación, enemigo desconocido un tiempo.
Una cuestión de “primordial interés nacional”
El 4 de Noviembre de 1966, la marea llegó a un nivel jamás alcanzado antes: más de un metro de agua invadió Venecia, las islas de la laguna y la laguna misma y el mar abrió más brechas a lo largo del litoral. Los daños fueron incalculables. Desde entonces, inició el nuevo y moderno capítulo de la salvaguarda de Venecia, declarada cuestión de “primordial interés nacional” (Ley especial 171 de 1973), en el que participan el Estado (defensa física y tutela ambiental), la Región del Véneto (descontaminación de las aguas que fluyen de la cuenca), los Ayuntamientos de Venecia y Chioggia (conservación y manutención urbana y desarrollo socioeconómico).
ACTIVIDADES PARA LA SALVAGUARDIA DE VENECIA Y DE LA LAGUNA DE COMPETENCIA DEL ESTADO
Defensa contra las aguas altas, defensa de las marejadas y tutela ambiental del ecosistema lagunar: éstos son los objetivos de las intervenciones para la salvaguardia de Venecia y de la laguna de competencia del Estado, realizados por el Ministerio de las Infraestructuras – Magistrado para las aguas de Venecia, a través del Consorcio “Venezia Nuova”. Se trata de un vasto programa de actividades, puesto en marcha desde hace muchos años en la laguna y en las poblaciones lagunares, en las que la defensa del mar siempre se ha realizado en sistemática y recíproca relación con la recuperación ambiental del ecosistema lagunar.
Defensa contra las aguas altas
Desde inicios del siglo XX hasta hoy las aguas altas se han hecho cada vez más frecuentes e intensas a causa de la disminución del nivel del suelo respecto al mar. El riesgo de una catástrofe como aquella del 4 de noviembre de 1966 está además siempre presente.
Sistema MOSE
Para poner definitivamente a Venecia a resguardo de todas las aguas altas, tanto las excepcionales que pueden amenazar la supervivencia como las más frecuentes que degradan las estructuras físicas y la calidad de la vida urbana, está en construcción, en las tres bocas de puerto de Lido, Malamocco y Chioggia (que vienen a ser los tres pasajes entre un litoral y el otro, que comunican la laguna con el Adriático) un sistema de compuertas móviles: el Sistema MOSE.
Sistema MOSE. Cómo funciona. El MOSE está compuesto por formaciones de compuertas que en condiciones normales de marea yacen llenas de agua, completamente invisibles, ancladas en los receptáculos del fondo de las tres bocas del puerto. Cuando se prevée una marea alta, las compuertas, vaciadas del agua mediante la introducción de aire comprimido, se elevan hasta emerger, creando una barrera continua que divide todo el tiempo necesario el mar de la laguna. Esto sin provocar interferencias con el ambiente ya que el MOSE, cuando no funciona, deja substancialmente inalterado el intercambio hídrico entre el mar y la laguna. Tampoco hay interferencias con la actividad del puerto, ya que incorpora puertos-refugio comunicados con cuencas de navegación que permiten el ingreso de las embarcaciones cuando las barreras estén levantadas: cuencas para embarcaciones de recreo y pesqueros en las bocas de Lido y Chioggia, otra cuenca para los grandes buques en dirección al puerto, en la de Malamocco. A día de hoy se ha establecido que las compuertas se levanten para afrontar mareas superiores a +110cm, altura hasta la cual las poblaciones se protegen con el realzado de orillas y pavimentaciones. De esta forma, las compuertas funcionarían como media de 3 a 5 veces al año, con una duración de 4 a 5 horas cada vez.
Sistema MOSE y aumento del nivel del mar. En un futuro, el fenómeno de las aguas altas podría agravarse por el aumento previsto del nivel del mar como efecto de los cambios climáticos. Respecto a este problema, el MOSE, junto al refuerzo del cordón litoral, ha sido proyectado para hacer frente a un
Defensa local contra las aguas altas
Para contrarrestar las inundaciones más frecuentes, están en vías de actuación desde hace años algunas obras de defensa local de las poblaciones lagunares y del litoral a través del “realzado” de las orillas y de la pavimentación pública en las zonas urbanas más bajas respecto al agua. Esto conlleva complejos trabajos para evitar también las infiltraciones del agua del subsuelo y del rebosamiento de las alcantarillas y para proteger las plantas bajas de los edificios. Las elevaciones tienen límites precisos dictados por el contexto urbano, arquitectónico y monumental de cada área y el Sistema MOSE es por tanto necesario para garantizar la total defensa respecto a todas las aguas altas, incluso en casos extremos.
Lo que se ha realizado (noviembre 2007): El avance de los trabajos del Sistema MOSE está alrededor del 37% y la obra podrá ser terminada en el 2012. A día de hoy, se han realizado además casi 90 Km de orillas en las poblaciones y se ha protegido contra las inundaciones más frecuentes un territorio de casi 1200 hectáreas.
Defensa contra las marejadas
El cordón litoral representa la primera y natural defensa de la laguna respecto al mar. A lo largo de los siglos, las playas del litoral se han reducido drásticamente de amplitud o han sido incluso eliminadas, dejando cada vez más expuestas las poblaciones costeras y la misma laguna a la violencia de las marejadas. La erosión de los litorales se ha afrontado con un completo programa de actuación, casi acabado, que consiste en la creación de nuevas playas o en la ampliación de aquellas ya existentes y en la reconstrucción, donde es posible, del cordón de dunas con la intención de recrear el hábitat para las características especies animales y vegetales. Al mismo tiempo se ha procedido también a la consolidación de los muelles foráneos que delimitan las [bocas del puerto], construidos entre el siglo XIX y el siglo XX.
Lo que se ha realizado (noviembre 2007): A día de hoy, han sido reconstruidos o ampliados más de 45 kilómetros de playas y han sido re-naturalizados más de 8 Km de dunas. Casi 11 Km de muelles foráneos han sido reestructurados.
Tutela ambiental
Recuperación morfológica.
Erosión, aguas altas y oleaje están gradualmente transformando la laguna, por lo cual ésta pierde las características físicas de zona húmeda y adquiere al contrario aquellas simplificadas e indiferenciadas, del ambiente marino. Para contrarrestar estos fenómenos, se ha puesto en marcha un intenso programa de salvaguardia de hábitats como barene, velme y bajíos y la reconstrucción de las funciones ecológicas e hidrodinámicas que estos desempeñan, participando también en la recalificación naturalísta y paisajística del ecosistema. Las actuaciones van desde el redimensionamiento de los canales lagunares hasta el empleo de los sedimentos dragados para la realización de barene y velme desaparecidas; desde la protección de las barene existentes, con las tecnologías más avanzadas de la ingeniería naturalísca, hasta elevar los fondos para reducir el oleaje. De este programa también forman parte los trabajos de reconstrucción de las orillas de las islas menores.
Lo que se ha realizado (noviembre 2007): A día de hoy, se han reconstruido alrededor de 1200 hectáreas de velme y barene, se han protegido 22 Km de bajíos y reconstruidas las orillas de 12 islas menores.
Mejora de la calidad de las aguas y de los sedimentos
Las intervenciones competencia del Magistrado de las Aguas para la mejora de la calidad de las aguas y de los sedimentos lagunares tratan, en concreto, de aislar los contaminantes presentes en los vertederos, que se utilizaban en el pasado para eliminar residuos de distintos orígenes, entre ellos escorias de las producciones industriales. Tratan también la protección de los canales de la zona industrial de Porto Marghera (fondo y riberas) de residuos provocados por los trabajos acumulados con el tiempo. Las actividades comprenden también actuaciones para reducir las sustancias contaminantes transportadas a la laguna desde los cursos de agua, que fluyen desde la cuenca, recreando las zonas húmedas de transición entre la tierra firme y la laguna, capaces de filtrar y absorber los contaminantes, separándolos de la masa hídrica (fito depuración).
Lo que se ha realizado (noviembre 2007). A día de hoy, se han asegurado más de 35 Km de riberas de los canales industriales y se han dragado de los fondos y eliminado en vertederos apropiados más de 320.000 mc de sedimentos contaminantes. Se han aislado del medio ambiente circunstante 5 ex-vertederos con una superficie total de 182 hectáreas.
Maria Giovanna Piva
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