Sebastiano Ricci (Belluno 1659 - Venecia 1734) fue un pintor véneto que vivió entre los siglos XVII y XVIII. A la edad de veinte años fue hasta Boloña y después a Parma, donde, por invitación del duque Ranuccio, llevó a cabo la Virgen del Serrallo de 1685, y a continuación a Roma donde estudió la decoración barroca. Cuando al final del siglo XVII volvió en Véneto, influenciado por Correggio, Carracci y después por
Paolo Veronese, Ricci se había ya alejado de la cultura figurativa del lugar. En aquel momento fue autor de obras en cuyo empaste cromático, luminoso y brillante se fundieron el
decorativismo barroco y la tradición colorista veneciana. En este período inició una colaboración con su primo Marco (Belluno 1676- Venecia 1729) que lo siguió a Inglaterra para trabajar en una Resurrección para el hospital de Chelsea y en diferentes telas con temas mitológicos para la Burlington House, en Londres, hoy sede de la Royal Academy. Artista ya de fama internacional, en 1724 fue llamado por los Saboya a Turín, para pintar algunas telas en el Palacio Real y dos retablos de altar para la Basílica de Superga. Del mismo autor son: el techo del palacio Colonna en Roma, la cúpula de San Bernardino a los huesos (1695) en Milán, los frescos del palacio Marucelli (1706-07) en Florencia, los retablos (1733) para la iglesia de San Roque y la Virgen en trono y santos (1708) en
San Jorge Mayor en Venecia.