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Tomando como inspiración las espléndidas láminas diseñadas por el pintor Canaletto y entalladas en el cobre por el grabador Brustolon en 1776 y hoy conservadas en el Museo Correr, se describen aquí las fiestas ducales más importantes y solemnes de una grande y fastuosa Venecia. El genio de Canaletto representó las escenas de las fiestas describiendo cada detalle, desde los edificios hasta las decoraciones, desde las embarcaciones hasta los vestidos y a los escenográficos contextos.
1 - Presentación del Dux en San Marcos:
Ésta es una de las ceremonias solemnes unidas a la elección del Dux, de gran importancia simbólica. En el interior de la basílica de San Marcos, el “Serenísimo”, recién elegido, era mostrado y presentado al pueblo por el más anciano de los cuarenta y un nobles electores. El Dux se comprometía en esta ocasión, mediante fórmulas rituales, a garantizar a la República paz, prosperidad y justicia.
2 - Traslado del Dux en palanquín por la Plaza de San Marcos:
Tras la ceremonia de toma de posesión en la basílica, el dux subía al pozzetto y era triunfalmente transportado a la plaza por los arsenalotti. Durante el trayecto alrededor de la plaza, el Dux donaba, al pueblo que festejaba, monedas de oro y plata acuñadas para la ocasión, mientras las Procuradorías se adobaban para la fiesta con tapices y paños de adorno.
3 - Coronación del Dux en la Escalera de los Gigantes:
En el patio de honor del Palacio Ducal se llevaba a cabo el rito de la coronación. Desde 1485, ésta ceremonia dejó el aula del Senado y pasó a desarrollarse al aire libre, con el escenario de la imponente Escalera de los Gigantes, recién construida. El Dux, enunciando las “promesas”, juraba fidelidad a las leyes del estado y recibía el camauro y la zoia.
4 - Agradecimiento del Dux al Consejo Mayor:
La primera intervención del Dux en el Consejo Mayor, el principal órgano legislativo del Estado Veneciano, representaba el momento conclusivo de la ceremonia de toma de posesión. En el espléndido salón del Palacio Ducal que albergaba al Consejo, el Dux agradecía por su recién elección quitándose el cuerno ducal en señal de reconocimiento.
5 - Partida del Dux en el Bucintoro hacia el Matrimonio con el Mar:
Después del rito de la toma de posesión, una de las solemnidades ducales más importantes es el Matrimonio con el Mar. El Dux, embarcado sobre el Bucintoro, la galera monumental veneciana para las ceremonias, era acompañado por un cortejo de barcas hasta la isla del Lido. Allí el Dux celebraba el rito del Matrimonio, lanzando un anillo al mar, en recuerdo de la partida de la victoriosa expedición, hacia Dalmacia, del Dux Pietro II Orseolo en el año Mil.
6 - Parada del Dux con el Bucintoro en San Nicoló:
Terminado el rito del Matrimonio, el cortejo se dirigía hacia la iglesia de San Nicoló del Lido para asistir a una misa solemne. En esta iglesia se veneraba San Nicoló, un santo muy querido en Venecia por ser el protector de los navegantes. Acabada la función, el Dux y su amplio séquito regresaban a la ciudad para presidir los banquetes en el Palacio Ducal.
7 - El Dux asiste a la Fiesta del Jueves de Carnaval:
Ésta antigua fiesta, ratificada definitivamente en 1550, evoca la victoria del dux Vitale Michiel II en 1162 contra el patriarca de Aquileia. Desde el siglo XVI, la gran fiesta del jueves de carnaval comenzó a realizarse en la Plaza de San Marcos, rodeada por tribunas atestadas por un gran gentío, con el Duxque asistía a los espectáculos desde la logia del Palacio Ducal. Para la ocasión se montaba la “Macchina”, construcción escenográfica de tres pisos que servía entre otras cosas para lanzar repetidamente fuegos artificiales. Alrededor de ésta, se llevaban a cabo las “Fuerzas de Hércules” con habilidosos acróbatas que formaban pirámides humanas, la “Moresca”, una danza de tipo militar, “el Vuelo del Angel”, después llamado “Svolo del Turco”, con un audaz funámbulo que planeaba sobre una cuerda desde el Campanario hasta el Palacio Ducal.
8 - Visita del Dux a la Salte:
La visita del Dux a la iglesia de la Virgen de la Salte (Salud) es una conmemoración que remonta al noviembre de 1631, como recuerdo de la salvación de la terrible pestilencia que se había abatido sobre Venecia el año anterior. El ritual, con un puente de barcas hecho por los fieles, sobrevivió a la caída de la República y continuó durante los sucesivos decenios gracias a la gran devoción popular.
9 - Procesión del Dux en el día del Corpus Domini:
El Corpus Domini es una de las fiestas religiosas que, a pesar de celebrarse en Venecia desde 1295, fue ratificada en 1454 por el Consejo Mayor. El ritual consistía, bajo las miradas del Dux y de los feligreses, en una solemne procesión por la Plaza de San Marcos de un baldaquín que llevaba un ostensorio y estaba adornado con las insignias de las Escuelas Grandes. Una obra maestra de Gentile Bellini de 1496, La procesión en Plaza de San Marcos, expuesto en la Galería de la Academia, ilustra el evento perfectamente.
10 - Visita del Dux a San Zacarías el día de Pascua:
Otra ocasión de visita pública del Dux a un lugar de culto. En el día de Pascua, el dux llegaba en procesión por tierra hasta San Zacarías, la iglesia donde residían, para el noviciado religioso, las más nobles y ricas doncellas del patriciado veneciano. El motivo de esta conmemoración se debía quizás a una especie de patronato que el Dux detenía sobre esta antigua iglesia, levantada en el año 827 por voluntad del Dux Giustiniano Particiaco.
11 - Recibimiento de los embajadores delante del Dux en el Colegio:
Una de las funciones oficiales más solemnes del Dux era la de acoger a los embajadores extranjeros, los nuncios y los representantes en visita a la República con sus delegaciones. La sala del Palacio Ducal diputada a este fin era la del Colegio, que albergaba las asambleas de las mayores magistraturas del Estado.
12 - Banquete del Dux:
Los banquetes de la República se desarrollaban con gran fastuosidad y según un código ceremonial ritual, formando parte de las varias funciones solemnes de la vida civil de la Serenísima. El Dux invitaba a los embajadores y a las más altas autoridades del Estado en varias ocasiones convivales, que coincidían frecuentemente con importantes conmemoraciones religiosas. Desde el siglo XVII las recepciones se tenían en la Sala de los Banquetes, edificada con esta función por el Dux Antonio Priuli en un ala del Palacio Ducal.
1600 - 1700 - - rev. 0.1.17