Pietro Longhi (Venecia 1701-1785) fue un insigne pintor veneciano del siglo XVIII. Alumno de Antonio Balestra, siguió en un primer momento el filón de la gran tradición decorativa (Caída de los Gigantes, 1734, palacio Sagredo en Venecia). A continuación, su pintura percibió la influencia del boloñés Giuseppe María Crespi, como muestran la Escenas campesinas de
Ca' Rezzonico y de la
Pinacoteca Querini Stampalia. En 1745 decoró la capilla de la Virgen de Loreto en la
Iglesia de San Pantalon, y en 1756 fue acogido en la Academia Veneciana de pintura y escultura, presidida por
Giambattista Tiépolo, donde enseñará durante más de veinte años y para la que, en 1762, completó una de sus telas más famosas, el Pitágoras filósofo. Al mismo tiempo había ido alimentando una unión bastante estrecha con la aristocracia véneta, que lo indujo a producir mucho bajo encargo de las familias Grimani, Manin y Querini. Pietro Longhi supo reproducir con espíritu gustoso y refinado escenas de costumbres y de vida veneciana cercanas, de cierta manera, al teatro de Goldoni: El Concierto, El Maestro de baile, La Toilette, El Sacamuelas (todos estos cuadros en muestra en las
Galerías de la Academia); Muestra del rinoceronte y La visita del moro (Cà Rezzonico); Escenas de vida doméstica (Pinacoteca Querini Stampalia).